WEINIG Conturex 125 VARIO: una máquina potente de enorme rendimiento y dinámica

Mesa de pinzas PowerGrip y eje U Con la interacción de la mesa de pinzas patentada PowerGrip, el eje U, la medición de piezas de trabajo (opcional) y la alineación de las piezas se consigue una alta seguridad de los procesos.

Cada ventana de madera contribuye a reducir las emisiones producidas al reciclar, por ejemplo, ventanas de plástico. WEINIG, como proveedor de sistemas para la fabricación de ventanas es consciente de su responsabilidad por la naturaleza y contribuye a su protección con una modernísima tecnología de motores y la recuperación de energía.

Con la nueva mesa de pinzas Vario-PowerGrip, WEINIG sienta bases completamente nuevas. La distancia variable entre las pinzas permite máxima flexibilidad con una posición óptima de sujeción. El mecanizado de testas dobles en combinación con el mecanizado de piezas dobles garantiza un excelente rendimiento de piezas.

Para el Conturex está disponible toda una gama de unidades de taladro, aserrado y de fresado de muy alta calidad. En su mayoría se utilizan grupos principales de 20/30 kW, refrigerados por aire y de larga vida útil. El accionamiento indirecto protege el motor, incluso en situaciones críticas. Gracias a la tecnología independiente de ejes, es posible que dos husillos principales trabajen simultáneamente. Esto abre nuevas perspectivas en la técnica de aplicación. El desbaste con perfilado de acabado simultáneo o la fabricación de perfiles con varias herramientas permiten un desarrollo productivo de la fabricación. Hay disponibles unos grupos de fresado horizontales y verticales para las cajas de cerradura, aberturas, ranuras de ventilación y desagüe. El cabezal de 5 ejes para aserrar, taladrar y perfilar garantiza una flexibilidad absoluta. El husillo universal de WEINIG cumple todo el abanico completo de deseos de aplicación.

El Conturex demuestra máxima flexibilidad en lo que a los ensamblajes angulares respecta. El usuario puede elegir entre macho/hembra, unión angular con espigas y ensamblaje angular mecánico. Gracias a un diámetro máximo de las herramientas de 340 mm y a un peso de las mismas de hasta 12 kg, se pueden emplear las herramientas de machihembrado sin ningún problema. Gracias a la profundidad de las entalladuras de 140 mm como máximo, esta tecnología se puede aplicar también para puertas y la fabricación de elementos. Es posible realizar en cualquier momento un reequipamiento posterior, una modificación o una ampliación para producir variantes de ensamblajes angulares. De esta forma contará con una solución integral de WEINIG para su taller, adaptada a su serie de producción y hecha a medida de las exigencias de sus clientes.

Hoy en día, el fabricante de ventanas tiene que ofrecer una gama muy completa de elementos de construcción. La cantidad de formas, colores, tipos de madera, herrajes, sistemas de ventanas, espesores de madera es tan grande como nunca antes. Todo ello exige un porcentaje bastante alto de fabricación en la propia planta. Todo tiene que funcionar perfectamente, comenzando por la medición y el registro de datos, el diseño en el programa de fabricación de ventanas, la organización en el almacén, el corte con optimización o el tronzado previo de la madera, el calibrado o cepillado con la producción de junquillos, la fabricación completa de piezas individuales e incluso el clavado y encolado de espigas. Gracias a la integración de productos de WEINIG, en este proceso de fabricación se ha creado una plataforma común de comunicación.

Las condiciones del mecanizado de la madera son más complejas que en el caso de otros materiales. Sobre todo, en el mecanizado de maderas de difícil desprendimiento de virutas se producen fácilmente vibraciones que ocasionan superficies de mala calidad. En el Conturex es diferente. La estructura de pórticos, extraordinariamente estable y con una alta rigidez, evita el llamado «momento de vuelco». Debido al desacoplamiento del eje X que ha sido traspasado a las mesas PowerGrip, casi no se producen vibraciones. Los husillos roscados a bolas rodantes y sistemas de guiado lineales ofrecen una excelente precisión de posicionamiento y de vía, incluso a velocidades de avance altas. El resultado son superficies óptimas, incluso al tratarse de geometrías de fresado complicadas.